lunes, 22 de agosto de 2011

Adentro y afuera

[Amaras a tu prójimo como a tu mismo - zionismo social]

Ayer sábado la multitudinaria marcha protesta que se había vuelto costumbre en el último mes no se realizó. La actividad en el campamento principal de la avenida Rotschild se notó visiblemente disminuida el dia de hoy cuando pasé por ahí en las horas de la tarde, momento en el que generalmente se vienen reuniendo los diferentes comités de la manifestación. Mucha menos gente en las afueras de las carpas y grupos menores de personas alrededor de algún vocero que tímidamente empezaba su discurso.

[Reuníón en el campamento de la manifestación durante esta tarde. Hasta la semana pasada este espacio estaba densamente poblado]
La razón? Desde el jueves pasado comenzó una nueva oleada de ataques al sur de Israel desde Gaza y el Sinai en la frontera con Egipto, dejando un saldo de más diez muertos, decenas de heridos, cientos de damnificados, miles de atemorizados y un primer ministro enojado ordenando un contraataque severo contra Gaza y los terroristas que entre civiles se camuflan allí. Y como en un círculo vicioso que se repite una y otra vez, los rockets -cohetes explosivos- siguen hasta esta noche cayendo sobre las principales ciudades del sur de Israel, y los palestinos empiezan a contar también sus víctimas por la respuesta de Israel ante una escalada iniciada esta vez por el que, al parecer, es un nuevo grupo terrorista -diferente a Hamás- quienes, para empezar, dispararon indiscriminadamente a los pasajeros de un bus que viajaba de BerSheva a Eilat el último jueves.

Por esta razón, por el nuevo escenario -o ya viejo escenario- del conflicto entre Israel y Palestina, los líderes de las manifestaciones y protestas al interior del país decidieron no marchar este sábado, por solidaridad con las víctimas, o más bien con el gobierno, que debe estar ahora ocupado pensando cómo apagar este incendio y no le quedará cabeza para atender las demandas internas de su pueblo. Cocacola mata tinto como dirían en mi tierra, y mientras Israel siga teniendo como protagonista de su agenda el conflicto con el pueblo palestino, incluídos sus terroristas, y su atención tenga que enfocarse en defenderse y atacar afuera muy difícilmente las voces de adentro podrán ser escuchadas, los problemas de adentro podrán resolverse, más aún cuando los civiles mismos se sienten en duelo y decaídos como para alzar la voz y mantenerla.

Pero, por otra parte, si se mira a la forma cómo Israel se conduce a la solución de este complejo conflicto, no debería ser ese precisamente un motivo más para alentar el cambio?, una cuestión más para sumar a las exigencias de justicia social por parte del pueblo? No podría ser esta la oportunidad para que el pueblo en lugar de "calmarse" en señal de solidaridad, aprovechara para expresar qué es lo que piensa, cómo visualiza una posible solución, cuál es su posición frente al cada vez más inminente establecimiento de un estado palestino, cuál es su posición para lograr la paz en esta dolida región? Dejar ver qué sienten los ciudadanos de a pie, los estudiantes, las madres con sus cochecitos, los médicos que no se resignan a sus bajos salarios, los que no les alcanza para pagar el arriendo. Es también con ellos... o en este caso si será mejor dejar las cosas en manos del gobierno?

lunes, 15 de agosto de 2011

De discursos, textos y manifestaciones


[Mírate a ti mismo/qué ves?/Toma responsabilidad!]
A Guy Sharett, un amigo israelí y gran estudioso de la lengua hebrea, entre muchas otras que le apasionan, se le ocurrió la buena idea de complementar sus clases de hebreo con recorridos por las manifestaciones y "campamentos protestas" en Tel Aviv con el fin de estudiar las consignas y carteles que adornan ahora las avenidas de la ciudad.

[Ser o dejar de ser/ El pueblo pide justicia social]

Como experiencia para adentrarse en este idioma en su expresión callejera y cotidiana, en su contexto real y popular, la iniciativa resulta fantástica, buena idea para los profes de idiomas. Y de paso se me antoja compartirles algo del espíritu y las demandas del pueblo israelí que por fin vuelca la mirada sobre sí mismo, su gobierno, su economía, sus problemas, los de adentro, que bastantes los tiene, después de estar tan acostumbrado a mirarse sobretodo en las peleas con sus ya conocidos vecinos.

Aquí les dejo una muestra y un corto video de Guy "Aprendiendo cómo protestar en hebreo"

slogan de la manifestación [El pueblo pide justicia social]

                                     
                                              [Crecimiento? ja ja ja]


Mi favorito [I´m a politic text - Soy un texto político]

Un interesante juego de palabras: en el mejor de los casos se podría traducir como [Israel es valiosa para mí] pero definitivamente en este caso se trata de la segunda opción [Israel es cara para mi]

Francia inspiradora... será que todavía aplica?

 [Learning how to protest in hebrew - credits Guy Sharett]



domingo, 7 de agosto de 2011

El pueblo pide justicia social



Poco he visto en los medios de comunicación hispanos sobre las protestas y manifestaciones que por estos días sacuden a este país a todos los niveles posibles, aunque hasta ahora ha tomado una fuerza inpredecible. Al parecer Israel no se quiere quedar atrás -a su manera- de la ola revolucionaria que brotó en medio oriente reclamando libertad.

En este caso, la consigna es otra, no se trata de la lucha contra ningún regimen, se trata de la sociedad entera alzando la voz por unas condiciones económicas y sociales coherentes y humanas, sin tener que convertirse en un esclavo moderno para intentar alcanzar al menos pagar tu arriendo, por que ni para soñar con comprar una casa alcanza.

Todo comenzó con la iniciativa de una joven estudiante universitaria luego de que repentinamente el dueño del apartamento compartido donde vivía le aumentara el 50% del arriendo. El 50%!! Cuál fue su reacción? Armar una carpa en Rotschild, una de las más populares y "bien vistas" avenidas de Tel Aviv, y convocar por el mágico facebook a que todo aquel inconforme por los altos precios de arriendos y propiedades se uniera a su causa. En un par de días la avenida comenzó a llenarse de más y más carpas, pancartas, salas improvisadas con muebles recogidos en las calles, reunión de estudiantes, jóvenes, empleados, desempleados, homeless, ciudadanos que ya habían perdido la esperanza de que algo se pudiera hacer contra los absurdos precios de un alquiler en esta ciudad. La avenida Rotschild se ha convertido en un extenso campamento de manifestantes dispuestos a quedarse ahí bajo el sol inclemente del verano hasta encontrar una solución, y cientos de carpas ya se pusieron a lo largo de todo el país.


Fotos  Haharetz
Pero la cosa no se quedó en las carpas y los altos costos de arriendo, como un virus la inconformidad salió a flote por el aire y contagió a todos los ciudadanos despertando en cada uno la sed de lograr un equilibrio social y económico urgente. Marcha de las madres con sus coches de bebe por la carestía de los productos y jardines infantiles. Marcha de los medicos por las precarias condiciones de trabajo y los bajos salarios. Marcha de los taxistas por lo que sea que no les funciona bien en su oficio. Marcha de todos los sectores sociales comprometidos en una búsqueda de mejores condiciones de vida.


Poco a poco las fuerzas se fueron sumando y el resultado es increible. En los últimos tres sábados se han congregado todos los que protestan en grandes manifestaciones. La de ayer fue una marcha sin precedentes en este país, cerca de 400mil personas (de un total de 7millones de habitantes), en todas las ciudades salieron a las calles para reclamar y exigir un cambio profundo en el orden social de Israel. Gente de todas las edades, de todos los estratos, de todas las proveniencias unidos en una misma voz.

Para mi fue realmente conmovedor presenciar la capacidad de la masa para movilizar tanta energía y demostrar que si las personas se ponen de acuerdo los gobernantes no podrán continuar como si nada pasara tomando decisiones de puertas para adentro e ignorando al ciudadano quien realmente goza o padece las medidas dictadas por los líderes.

Todavía es incierto el curso que esta revolución pueda tomar y al parecer entre tantas exigencias el foco se puede fácilmente perder, pero ser testigo de la fuerza y la iniciativa de una multitud para intentar cambiar su realidad es para mi ya plenamente esperanzador.

martes, 7 de diciembre de 2010

El própósito de la guitarra

El año pasado entre mis propósitos de año nuevo me propuse "aprender a tocar guitarra"! Eso fue cuando estaba en Colombia en el último diciembre. Cuando regresé a Tel Aviv me conseguí una guitarra. Me la prestó un amigo que la tenía guardada en algo así como el ático, en una caja grande y vieja, con dos cuerdas reventadas y el resto desafinadas.... pero en buen estado. Era de un abuelo, o tio o hermano del abuelo que le quedó por herencia.
Yo me la traje al hombro hasta mi casa, contenta y dispuesta a hacerle los arreglos necesarios para empezar a tocarla. Pero para decepción de mi misma, la guitarra estuvo recostada sobre el mismo muro toooodo el año y yo no la había reparado. Me acuerdo que un día quise abrirla pero la caja tenía un mecanismo así como extraño y como una tonta persistí y persistí viéndo la guitarra allá adentro por las ranuras de la caja, pero no logré abrir la cerradura. Me impacienté, la volví a poner donde estaba y desistí.
Muchas veces, cuando estaba por ahí en cualquier parte, pensaba para mis adentros...mmm... yo debería llevar a arreglar la guitarra.... pero mi impulso no iba más allá de la ocurrencia...
En fin, la cosa es que con esta velocidad del tiempo extrasupersónica, un día cualquiera ya es diciembre! y uno cuando era niño que esperaba todo el año a que llegara el bendito diciembre!, era tooooodo un año lo que había entre un diciembre y otro. Pero ahora un dia es invisible, una semana es una breve sección de tiempo, un mes se va así rapidito, y un año deja de ser lo que era antes. Será que en verdad que eso pasa sólo cuando uno es niño o que en verdad los tiempos pasados fueron mejores. Cómo vivirán ahora los niños la sensación de la velocidad del tiempo...
Pero ese no es el tema... el tema es que ese día que me dí cuenta de que ya era diciembre, miré la caja de la guitarra y la llevé al hospital de las guitarras. Allá la limpiaron, la completaron y la afinaron. Lista para tocar! No podía dejar que mi propósito de año nuevo se fuera por los aires, no ese propósito. Me gusta la música, y quiero aprender. Además me estoy convenciendo de que muchas veces las cosas no pasan porque uno no va hacia ellas.
Hay que vivir la vida bien.

lunes, 6 de septiembre de 2010

Naturaleza humana

Como seres humanos siempre nos hemos preocupado por estudiarlo, clasificarlo, analizarlo, descifrarlo, razonarlo todo. Las cosas se vuelven objeto de estudio y creemos conocer los fenómenos como hechos. realidades aceptadas. Pero personalmente, creo que nos hemos ocupado tanto de mirar afuera que poco nos hemos enterado de lo que somos como humanos, como especie.
Y no me refiero a una labor meramente antropológica. Porque sin duda existen miles de estudios sobre este extraño clan que conformamos. Pero más allá de objeto científico o tema de investigación qué hemos sido para nosotros mismos?
Creo firmemente que sólo el reconocimiento del ser humano sobre sí mismo y sobre las estúpidas decisiones que toma con la razón que cree su mayor tesoro, pueden influenciar sobre el avance absurdo que hacemos como colectividad. Deberíamos conocernos más el alma. Los seres humanos somos bastante peculiares pero no estamos en la cima de ninguna escala. Somos uno más.
Y tampoco es que quiera un mundo dorado con arcoiris de fondo, eso dañino y pulsional es también parte de nos. Pero qué estúpidos somos! qué estúpidos somos para manejarnos con otro y habitar este planeta.

domingo, 29 de agosto de 2010

Tiempo

Un poemita de otros tiempos que no pierde vigencia....

Hay cada vez menos tiempo entre los días,
se desliza fugaz entre deberes y trasnochos,
entre placeres y humo y fantasmas nocturnos
Cada vez hay menos tiempo entre los días,
se acaba en el instante mismo que dura el parpadeo
cuando al abrir los ojos, asombrada,
se ha hecho tarde otra vez

miércoles, 18 de agosto de 2010

Boda israelí: alegría, comida y cheque

Además de ser la época del año para ir a la playa, broncearse y renegar por el insoportable calor, el verano es la época dorada de las bodas. Nada más en agosto recibí cuatro invitaciones diferentes, de las cuales únicamente dos eran de un buen par de amigos. La gente se vuelve loca aquí con el tema de las bodas. Invitan a los amigos, conocidos, familiares, amigos de los familiares, vecinos, compañeros de trabajo, viejas amistades, y hasta más. Sacan la casa por la ventana, preparan una gran celebración con bastante tiempo de anticipación y ofrecen un tremendo festín donde las opciones de comida parecen no tener límites.

El modelo promedio de fiesta es más o menos así así: Los invitados va llegando generalmente con una hora de anticipación al lugar de la celebración, que bien puede ser en un gran salón rodeado de jardínes, en medio de un bosque o a la orilla del mar. A la entrada se recibe una tarjetita con el número de la mesa y justo al lado de la recepción hay una caja fuerte para depositar el cheque que cada uno trae como presente, tal como dicta la tradición. Nada de lista de novias, o llegar con una gran caja de regalo. Aquí se regala plata, una cantidad que se calcula según el afecto. Sí, es frívolo, es muy frívolo para mi gusto, pero esa es la costumbre.

Desde que uno llega se empieza a comer, hay puestecitos de atractivas entradas y aperitivos por todo el lugar, pequeñas delicias para picar mientras comienza la ceremonia. Ya con esto uno se podría llenar, pero hay que dejar lugar para el plato principal que en poco viene. Los novios por su parte se pasean entre la gente saludando a los invitados, mientras el fotógrafo los sigue con su lente por donde vayan.

Pasado cierto tiempo anuncian la ceremonia. Los novios desfilan juntos hasta la jupá, una especia de carpa de tela sostenida por cuatro varas, la cual simboliza la casa, el hogar de la nueva pareja. La novia lleva un velo sobre su rostro y la familia de ambos espera debajo de la jupá junto con el rabino. Allí se lee el contrato matrimonial, se intercambian los anillos y se dicen las siete bendiciones. Al final, el novio, de un zapatazo, rompe una copa para rememorar, aún en los momentos de felicidad, la destrucción del templo de Jerusalén, descubre el velo de la novia y sellan su unión con un romántico beso. Y apenas los novios han terminado de besarse, ya todos se dirigen a la jupá para felicitarlos, ambos reciben abrazos por doquier y un mar de gente inunda aquel pequeño espacio

He observado que en realidad la gente no presta mucha atención a la ceremonia, están distraídos, o hablando entre sí, seguramente esperando impacientes la hora de que por fin llegue la comida. Tal vez he percibido esta actitud en varios casos sólo por casualidad, pero tiendo a pensar que la gente sigue llevando las tradiciones así con el tiempo le importen menos.

Y bien, finalizado el rito oficial, ahora sí! a comer! Otra vez a comer! Sólo es dar media vuelta y ya está el banquete listo, humeante, con todas las opciones posibles reunidas en el mismo lugar. Toda variedad de carnes, pollo, pescado, arroces, papas, antipasto, vegetales, ensaladas, y demás. Un desborde de comida que parece no acabar.

Después, la música, el baile, la bebida. Los israelíes son muy alegres, y se la gozan toda. La gente se mueve al son que le toquen, y viejos y jóvenes lo hacen por igual. Luego, no es de extrañar que en medio del baile se repartan chocolates, helados y dulces, sin interrumpir el baile la gente no para de comer y beber.

Aunque no va con mi estilo personal, cuando se trata de la boda de un verdadero amigo o una persona a la que se tiene un sincero afecto, la siempre magnífica fiesta es sin duda un momento de alegría compartida y una noche para disfrutar sin parar. Pero de lo contrario,en este país la invitación a un matrimonio se convierte en un gasto más al mes. La gente sólo piensa en el cheque que ahora tiene que desenbolsar y lamenta no poder zafarse del compromiso. Llega el verano y llegan las bodas. Lástima que el concepto de un matrimonio íntimo, modesto y sin cheque de por medio no esté muy extendido en esta tierra prometida.